Hora de anunciar el tercer post en el blogcillo. Hora de agradecer a Luis Chaves -persona a quien admiro sólo por lo que escribe, habráse visto- por escribir 2 comentarios a mi primer post... de los cuales no me dí cuenta sino hasta bastantes meses después. Grande Chaves.
Para tratar de quedar a la altura, espero que una amiga haya podido conseguir "300 páginas" y me lo haya traído como se lo pedí. No sería un mal comienzo de año, después de un 2010 que -salvo una cara simétrica, piel tapa-de-dulce, ojos perro-corriendo, corazón de oro y temperamento de plutonio enriquecido, que duerme bajo el edredón as we speak- trajo poco más que pensamientos autodestructivos. Un documento color ecológico por ahí también se salva, pero en general si al 2010 se le ocurre regresar, lo devolvemos a patadas.
Afuera se oye a cada tanto el ruido de las palas raspando el pavimento. El alcalde Bloomberg jura que la nieve le juega sucio sólo una vez. La nieve. Jajajaja, echáte otro, Mike.